Dos amigos bajo la lluvia...
Los dos amigos, unos ojos con un brillo especial y una nariz aguileña, siguen paseando juntos bajo la lluvia que ha arreciado un poco. Las callejuelas están vacías, en algún callejón cuelga la ropa tendida mojándose.
En silencio caminan con la consciencia fuera de ese presente tan rasgado y fatídico. Van pasando calles y más calles, cruzan avenidas y se internan en sucios callejones. Van ensoñados en viejos recuerdos y con la templanza que da su vieja amistad.
Después de pasar un rato la lluvia ha cesado, aunque el cielo sigue tan gris como antes.
_ Giovanni._ Giovanni tuerce su nariz aguileña y mira a los ojos de Angelo _, vamos a por él. Se lo debemos a Paulo._ manifiesta Angelo con ese brillo especial en los ojos.
Giovanni continúa mirándole mientras contesta:
_ Vamos. Hace mucho tiempo que se lo debemos._
Los dos amigos se pierden por oscuros callejones pisando charcos en busca de su destino.
Escribir en el pasado los versos que se quedaron sin andar...